El dispositivo podrá portar hasta una tonelada de carga útil a distancias de 3.000 kilómetros.
Rusia construirá un dron de ataque de hélices basculantes y siete toneladas de peso para 2023, ha anunciado el subdirector del fabricante Kronshtadt, Vladímir Vóronov. El aparato volador será construido a partir del dron pesado ruso Fregat, que ocupa el nicho existente entre aviones y helicópteros.
"Cuando sea aprobado el motor, podremos crear al principio un dron de dos toneladas de peso que estará listo dentro de tres años. Será usado no solo para tareas de reconocimiento y ataque, sino también para misiones de transporte", dijo Vóronov a RIA Novosti.
La versión capaz de llevar siete toneladas de peso portará hasta una de carga útil y tendrá alcance de 3.000 kilómetros. "Es una distancia inalcanzable para un helicóptero. Su producción tomará tres años más", precisó el subdirector del fabricante de drones Kronshtadt.
El gerente de la firma agregó que los militares podrían usarlo como dron de ataque y que el dispositivo se desplegaría fácilmente fuera de aeródromos, pues les bastaría un claro en un bosque.
El experto en aviones no tripulados Denís Fedutinov comentó a RIA Novosti que teniendo en cuenta la experiencia mundial se puede pronosticar que el nuevo dron realizará múltiples tareas de transporte.
"Sobre su uso militar, [servirá para] suministro de armas, municiones, víveres, medicamentos a soldados en avanzadillas remotas y, posiblemente, evacuación de los heridos", explicó.
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