A pesar de la reciente presentación de los nuevos productos de Apple, muchos consumidores e inversores prefieren esperar una versión más actualizada del popular gadget, prevista para 2017.
Las ventas de iPhone han caído este año, por primera vez en la historia de este 'smartphone'. El problema es que cada vez resulta más difícil introducir nuevas funciones que puedan impresionar a la opinión pública. Al principio, las versiones actualizadas introdujeron cambios importantes, como la cámara frontal en el caso del iPhone 4, pero ahora las modificaciones no son tan revolucionarias, apunta el periódico 'The Daily Mail'.
¿Por qué es mejor esperar?
Según sostienen algunos analistas, el iPhone 8 podría contar con una pantalla más grande, que se extendería de lado a lado del teléfono y también con un botón 'home' integrado en la pantalla.
Algunos sitios web sobre tecnología aconsejan abstenerse de la compra hasta el lanzamiento de la versión más actualizada del próximo año, que conmemorará el décimo aniversario del iPhone. Según asegura el analista Jan Dawson, de Jackdaw Research, "parece que una de las razones de mantener el diseño este año es que llegarán cambios más importantes el año próximo".
El 7 de septiembre Apple presentó sus nuevos productos, el iPhone 7 y el iPhone 7 Plus, equipados con una carcasa más delgada y resistente al agua y al polvo. Los mismos cuentan con nuevos y sofisticados sistemas de cámaras, pantallas más brillantes y coloridas, así como una batería más potente. Pero seguramente lo que provocó más polémica es que no poseen conexión de auriculares, que serán inalámbricos. Además del esperado anuncio de los nuevos teléfonos inteligentes, la compañía lanzó el Apple Watch 2 sumergible.
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